Sobre nuestra ONG
MADRES VÍCTIMAS DE TRATA es una organización sin fines de lucro conformada por un grupo de madres, familiares, amigxs, voluntarixs, artistas y amigxs de mujeres, niñxs desaparecidxs para ser prostituidxs.
Nuestro objetivo principal es encontrarnos con otras madres y familias que están con el mismo dolor y la misma búsqueda para luchar juntas, salir de la soledad del problema personal y pensar alternativas, caminos a seguir y acciones a realizar.
Madres Víctimas de Trata (MVT) es una organización autogestionada y autónoma que se desenvuelve sin condicionamientos de ningún tipo a través del trabajo de sus voluntarios, aportes personales, donaciones, imaginación y solidaridad.
Buscamos combatir la trata con fines de explotación sexual, un delito que viola los Derechos Humanos más básicos, como lo son la libertad y la integridad física de las personas. Esta una forma de esclavitud mediante la cual se convierten a personas en mercancías, y puesto que la gran mayoría de las víctimas de la trata de personas para el comercio sexual son niñas y mujeres, es parte de la problemática de género.
¿Qué hacemos?
Brindamos contención y acompañamiento psicológico y social al momento de realizar la denuncia y búsqueda de las jóvenes, así como el trabajo de investigación y seguimiento de las causas en todo su proceso: desde atender un llamado hasta iniciar una querella. A medida que se suman nuevos colaboradores -profesionales de la salud, la comunicación, la educación y el derecho- nuestra tarea adquiere nuevas dimensiones.
En cada una de nuestras acciones nos proponemos empoderar a las víctimas, proveerles escucha, sostén emocional y material para que logren poco a poco salir de ese lugar de víctima y puedan trascender la ira, la impotencia y el dolor asumiéndose como personas libres con sueños posibles y proyectos reales de vida.
Es un camino bastante penoso y difícil el de buscar a una niña (niños, jóvenes, adultos) una vez que desaparece. Cada rescate es una batalla ganada a las siniestras redes de trata de personas. En ese momento comienza otra difícil tarea: la búsqueda de un lugar seguro a salvo de futuros secuestros, donde puedan recuperar su dignidad, integridad física, psíquica y social.